Oh
Acabo de recordar un beso. Me acuerdo de cómo pasó de ser algo casi fantasma, un pequeño roce a algo diferente. Los labios se abrieron, y un pez dorado pasó de una boca a la otra y luego regreso de vuelta. Nadaba entre esos dos mares que luego fueron uno.
Siempre me sorprende la memoria de mi cuerpo.
Siempre me sorprende la memoria de mi cuerpo.
Comentarios
Publicar un comentario