I never liked you, Chester Brown; Palestine de Joe Sacco.

Ayer terminé I never liked you de Chester Brown (1993). Un libro de corte autobiográfico, cuya acción ocurre en lo que parece ser fines de los 70 (o inicios de los 80) en una sección de Canadá donde había campos de trigo donde jugar a las escondidas. El tema está centrado en mostrar retazos de la vida del autor en su adolescencia, su dificultad para poder expresar sus emociones, la mente torpe que se suele tener cuando se es tan joven. Es un libro de una belleza parca, suave e impenetrable como la superficie frágil de la cáscara de un huevo. Lo colocaría en mi biblioteca imaginaria al lado de Seda de Baricco, La casa de cartón de Martín Adán y Se me apareció una mujer, de Renée Vivien.


Carátula del libro. Disponible en Drawn and Quarterly

Un detalle del interior del libro. Foto de Drawn & Quarterly

Si quieres conocer un poco más del autor, podría comentarte que es canadiense, que tiene otros trabajos que se ven súper interesantes como Ed,  The happy clown. Aún no leo ésta ultima pieza, pero en cuanto la tenga a la mano, comentaré algo pequeño aquí.

Recién empecé hoy Palestine de Joe Sacco. Dejé a medias su otro libro The Fixer por temas de tiempo pero, por algún motivo, no sé por qué no lo terminé antes de empezar Palestine. Creo que puede que sea por el hecho de que la historia de The fixer está vinculada con lo ocurrido en la guerra de los Balcanes, un tema del que conozco más o menos algo y que me atraviesa de vez en cuando con una ligera tristeza (acabo de recordar que el actor que interpreta a Perhan en la película Tiempo de Gitanos se suicidó durante el desarrollo de ese conflicto armado).  Queda pendiente la lectura de una historia sobre Yogoslavia y una biografía sobre Tito, el caudillo que mantuvo por mucho tiempo unido ese viejo país del que, al parecer, sólo los serbios tienen un buen recuerdo.


Josip Broz Tito, un tipo insólito y del que prácticamente no se nada. Pronto será.

Aquí un vistazo a The Fixer. Por algún motivo, aún no puedo evitar sentir tristeza por la vieja Yugoslavia (hace poco vi los últimos juicios desarrollados en La Haya para procesar crímenes de esta guerra) y el conflicto sangriento que enfrentó a vecinos en una guerra interminablemente resentida y difícil. Supongo que eventualmente superaré mi sensiblería (creo que he visto demasiadas películas serbias -además de las de Kusturica- y sobre gitanos como ésta) y podré leer parte de la vida de este hombre de diversas dimensiones que es Neven, el protagonista de The Fixer, a través de cuyos ojos se pueden entender algunos ángulos de este pedazo de historia.


Carátula respectiva de The Fixer, disponible en Drawn and Quarterly también.

Una belleza de ilustración, escala de grises. Pedazo de historia. Foto de Drawn & Quarterly

Volviendo a Palestine, puedo contar hasta ahora que el punto del que parte la narración es la mirada del autor que está involucrado en el relato como un corresponsal de guerra. Joe Sacco, para quienes aún no lo conocen, es un autor que además de artista gráfico también es periodista que cubre zonas en conflicto.


Carátula del libro. Disponible en Fantagraphics

Recién lo estoy conociendo y no he avanzado tanto Palestine para decir algo más que me ha atrapado. Me gustan los manejos de los planos en las viñetas, la composición en contrapicados, las perspectivas, la caracterización e individualización de los personajes. La manera de contar las cosas que evade el sentimentalismo que puede restar interés al tema de fondo. No puedo contar mucho más, sería mal llenar este post de huevaditas sin mayor propósito. 


Un vistazo al interior del libro. Imagen extraída de Fantagraphics.

Regresaré cuando haya acabado Palestine, para contar qué tal me fue. Sé que el post está incompleto, pero no quería dejar de recomendar éste cómic que promete demasiado.

Un abrazo.

Comentarios

Entradas populares