Ultimamente los vestidos son de color azul

Hace unos momentos me acordé la manera en que caminaba por este mundo. Los ojos abiertos con inocencia capital y algo de estupidez profundas.

El amor - odio hacia mi misma y hacia los que me rodeaban

Mis necesidades de desear ser querida a la vez

Mi cascarón sin romperse. 

Puras palabras fluian como manantiales para explicar el sexo, el mundo y esa ternura profunda e inexplicable que me poseyó desde que admití que la tenía. 

Se me hace inevitable ahora quedarme callada cuando siento el hermoso calor del sol al medio dia sobre mi cabeza, olvidar los pequeños odios de vez en cuando, las pequeñas y monstruosas hambrunas  dentro de mi, la música no necesita acompañamiento de palabras. 

Y cada vez que intento hablar de este mundo al que me aferro, porque es mio y el unico que me queda, los labios se me quedan secos, el corazon palpita veloz por los campos amarillos de trigo vistos dentro de mis recuerdos sobre quien soy, empiezo a tener sed de ese mundo y deseo con todas mis fuerzas no olvidarlo por las dificultades de la cotidianidad. 

Trato de sembrar una nueva flor al lado de ese pequeño charco oculto. Asi seguiré.